jueves, 18 de septiembre de 2008

La partitura como carta de amor

Uno de los compositores contemporáneos más célebres, el germano-argentino Mauricio Kagel, ha fallecido a los 76 años en Colonia (Alemania). Compositor de música clásica, de ópera y de bandas sonoras de películas como Un perro andaluz, de Luis Buñuel, Kagel estaba reconocido mundialmente como uno de los grandes innovadores de la creación musical. "El mejor músico europeo es un argentino, Mauricio Kagel", dijo en una ocasión el legendario compositor vanguardista estadouniense John Cage. "Cuando uno escucha música, ésta despierta otras sensaciones y sentimientos que se perciben al mismo tiempo. Cuando se compone pasa algo parecido: surgen en la nuca, bien dentro de la cabeza, imágenes, sensaciones y sentimientos. Por eso, cada partitura es una carta de amor en la que el autor expresa estos sentimientos. La música siempre los expresa y de ahí surge la necesidad de llevarlos también al público mediante la prolongación del sonido en el gesto visual", decía Kagel.