'Comandante, mire el pajarito'... La frase de Félix Rodríguez, a la derecha del Che, provocó la última sonrisa de Ernesto Guevara. Aún así, cuando el pajarito cantó finalmente al prisionero le dio tiempo a cambiar la mueca y volver al gesto serio. Le quedaba poco más de una hora de vida. Ocurrió el 9 de octubre de 1967, en la escuelita del pueblo de La Higuera, en Bolivia. El ejército boliviano había capturado al Che tras un enfrentamiento en el que el guerrillero fue herido en una pierna. El cubano Félix Rodríguez era agente de la CIA y había sido enviado por sus superiores para asesorar a los soldados bolivianos en su persecución del Che.